Los derechos digitales fueron reconocidos en los últimos años para mejorar la adecuación del marco normativo al mundo digital, su protección y relación con procesos similares en Europa y en el mundo. Este monográfico aborda el desarrollo de estos derechos, fruto de la reflexión impulsada en países como España y desde la UE como uno de los ejes estratégicos de la transformación digital.
Diferentes entornos, mismos derechos
Los derechos digitales son la extensión a este plano de los derechos fundamentales recogidos por Naciones Unidas, en especial la libertad de expresión y privacidad de las personas y aquellos que les permiten utilizar las tecnologías digitales. No obstante, el 40% de la población española desconoce que sus derechos fundamentales también deben respetarse en el terreno digital y el 75% asegura que le resultaría útil saber más al respecto.
Importancia de la tecnología
Ocho de cada diez personas españolas coinciden en que las tecnologías digitales serán importantes en sus vidas en 2030 y cuatro de cada diez piensan que las ventajas prevalecerán sobre los inconvenientes. Los asuntos que más preocupan a la ciudadanía son el cibercrimen, el bienestar de las y los menores, el uso ilegítimo de datos personales por parte de las empresas y la Administración y las brechas digitales.
Marco regulatorio
En España, los derechos digitales están regulados mediante la Constitución, la Ley de Protección de Datos y Garantía de Derechos Digitales y por la Carta de Derechos Digitales, una guía de referencia orientada a reforzar y ampliar estos derechos y aumentar la confianza de las personas ante los cambios tecnológicos. Además, tanto el Gobierno como la Unión Europea están impulsando iniciativas y marcos legislativos.