Este monográfico detalla cómo se lleva a cabo la medición de las competencias digitales en la Unión Europea, fundamentales para entender el grado de adaptación de la ciudadanía a los retos de la sociedad digital.
Asimismo, invita a reflexionar sobre la importancia que tiene que todos los grupos poblacionales puedan adquirir estas competencias en igualdad de condiciones, de forma que se reduzcan las brechas que aún existen a la hora afrontar los retos y oportunidades de la economía digital.
España cuenta con unos niveles de competencias digitales por encima de la media europea (el 64% de la población tiene competencias al menos básicas, situándose en 6º puesto, por delante de países como Francia y Alemania) y se ha puesto como meta, además de que el 80% de la ciudadanía cuente con estas competencias, que la mitad de ellas sean mujeres.